sábado, 5 de marzo de 2011

POMPAS




Uno de los últimos cuentos de literatura infantil que he comprado me ha dejado un sabor agridulce. 


Matilde Pompas una niña que nació para hacer pompas de jabón, grandes pequeñas , de colores…dedicó toda su vida a estudiarlas a mejorarlas y a ayudar a los demás através de la creación de pompas. Pompas para proteger cuadros, pompas contra el frío o calor, pompas para el sonido… Hasta que un día se encontró a un niño sólo , triste y abandonado. Pensando, pensando se le ocurrió protegerlo y ayudarlo con tres pompas: una para protegerlo del frio y el calor, otra contra el ruido y una tercera y fuerte para que nadie le pudiera dañar. Pero…¿Qué ocurrió con el niño?
Tanto lo quiso proteger que la primera pompa lo dejó más solo de lo que estaba, la segunda lo dejó sordo y la tercera le impidió conocer el calor de un abrazo y el susurro de unos labios Esta es la gran pregunta y la que te hace reflexionar: Lo aisló y pasado el tiempo se convirtió en una estatua en mitad de una calle.

Aquí está la cuestión ¿Cuántas veces creamos pompas alrededor de nosotros mismos? La mayoría de las veces para autoprotegernos de los demás,  para no mostrar nuestros sentimientos, para no enseñar lo que pensamos, de alguna manera para que no nos hagan daño, es un muro estre nosotros y  el resto .

¿Pero que ocurre cundo las pompas las creamos alrededor de nuestros hijos? Pues que a veces no les estamos preparando para lo que hay de puertas afuera de nuestras casa. Nos encontramos ante  la superprotección. Lógicamente no queremos que sufran, no queremos que les hagan daño…Pero ¿es eso bueno? Pues sinceramente creo que no.

Aunque me duela, desde mi posición de madre un poco histérica y superprotectora , creo que no les hacemos demasiado bien , porque los tenemos que preparar para lo que hay cuando salgan del nido , que sepan defenderse ante los demás y tomar las decisiones adecuadas.

Creo que es uno de los problemas que tenemos  los padres de hoy , que somos demasiado protectores. Lo veo por mi y por mis alumnos y sus padres: les hacemos todo, nos sentamos con ellos a estudiar, antes de que nos pidan algo se lo estamos dando, los premios son más que los castigos, y si le riñes más de la cuenta nos arrepentimos enseguida ¡Pobrecito, no se vaya a traumatizar! Y en el fondo ellos lo saben y en cierta medida se están aprovechando  de nosotros.

Ya lo decía Sócrates...y mira que ha llovido:
 " Los jóvenes de hoy aman el lujo, tienen manías y desprecian la autoridad. Responden a sus padres, cruzan las piernas y tiranizan a sus maestros." Sócrates


Me gustaría saber donde está el equilibrio, pero realmente no lo se .
Pero…

Vivir sin filosofar es, propiamente, tener los ojos cerrados, sin tratar de abrirlos jamás” René Descartes.

" Matilde orgullosa del bien que había hecho, se sacudió las manos y siguió con su vida, soplando de aquí para allá de Nueva York a Bagdag..."

El Álbum es precioso tanto el texto como las ilustraciones y os lo recomiendo a todos.

4 comentarios:

  1. Una reflexión preciosa acerca de la forma en que educamos y protegemos a nuestros hijos.
    Yo soy como tú: madre protectora y casi histérica en lo que se refiere a mis hijas. Siempre con la frase "por si...". Por si hace frío, la bufanda. Por si hace calor, el gorrito. Por si tiene sed, la botella de agua... por si se cae, se tropieza, llora...
    ¿No hacemos lo correcto al superprotegerles?. Es que no lo sé. Creemos que hacemos lo mejor pero puede ser que Matilde, como nosotras, nos hayamos equivocado o aún nos estemos equivocando y buscando el BIEN (en mayúsculas) estemos consiguiendo lo contrario.

    Buenísimo post Espe; para pensar mucho. ¡Eres grande, muy grande! y tus alumnos deben estar encantados contigo.

    Mi admiración y mis abrazos.

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  2. Me has emocionado Towanda .Pienso igual que tú, y no lo puedo evitar. Cuando se lo conté a los niños les hice la pregunta ¿Qué pasó con el niño? Y cada uno escribió una frase. Todas bonitas y hermosas, también alegres. Luego les conté el final y todos quedaron callados por unos minutos ( son niños de 7 - 8 años muy movidos). Cuando les dije que que les parecía una me contestó : "A mi me da mucho sentimiento que un niño no pueda sentir ni los besos ni los abrazos como yo." Me pareció precioso.Muchos besos amiga y gracias por tus palabras.

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  3. ¡Que suerte tienen tus niños! No todas las maestras cuentan cuentos tan bonitos que los hagan pensar y reflexionar de ese modo,con tanto sentimiento
    Las pompas de jabón que fuí poniendo alrededor de mis hijos se han ido explotando poco a poco y así se van a quedar,estoy cansada de soplar. Además me ha costado mucho pero me he dado cuenta de que ya es hora de que sean ellos mismos los que las hagan cuando vean que algo les prejudica, yo les podré prestar el jabón y les ayudaré a soplar si me lo piden pero no puedo hacer mucho más
    Después de tantos años haciendo pompas quiero tener tiempo para dedicarme a otras cosas.
    Un Beso

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  4. Preciosa tu reflexión, llegado el momento las pompas las tienen que hacer ellos y saberse proteger de lo bueno y lo malo. Pero hay estaremos prestándoles el jabón y enseñándoles a soplar.Buenas noches y feliz semana

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