domingo, 20 de febrero de 2011

MÁSCARAS






Suena el despertador. Te levantas y rápidamente vas a la ducha. Ya tienes preparada la cafetera, uno, dos, tres botones, empieza a funcionar la maquinaria.
Un día más preparándonos para la rutina, un día más cambiándonos las máscaras que nos ocultan.
  
Llega la hora . Salimos a la calle, uno, dos , tres...todos nos cruzamos, todos nos conocemos, todos nos saludamos, Hola, Buenos días,¿ que tal?, una sonrisa.

 Comienza el trabajo.
Nos colocamos la máscara y realizamos todo aquello que los demás nos piden: Sé amable, escucha, contesta con corrección, no pierdas los nervios, no grites, escucha , atiende, trabaja….escucha…



A veces te cruzas con compañeros con los que nada tienes que ver, que no te une nada a ellos, sonrisas forzadas, preguntas absurdas, otra máscara colocada.
Volvemos a casa y seguimos.

Cambiamos de máscara, aquí somos más nosotros mismos, pero a la vez estamos actuando. Un beso ¿Que tal? ¿Y el trabajo? ¿Te sientes cansado?¿Has tenido algún problema?. Y vuelve la rutina. Comes, recoges , descansas. Vuelta al trabajo.

Otra máscara puesta. Actividades , el coche, el fútbol, el inglés, vas cambiando de máscara según te encuentres en un espacio u otro.

Acaba el día y te relajas. Haces un repaso de la jornada. Al final ¿Qué te queda? Nada.
Y te pones a pensar. ¿Cuándo soy yo mismo’ ¿Cuándo he actuado por mi y no por los demás?¿Cuántas máscaras me he colocado?
Actuamos continuamente y nos cambiamos de mascara dependiendo en la situación que estemos o con quien estemos.

¿Cuál es mi máscara verdadera?

Solo Tu yo interno lo sabrá.

Te duermes. Suena el despertador. Te levantas y rápidamente vas a la ducha. Ya tienes preparada la cafetera, uno, dos, tres botones, empieza a funcionar la maquinaria.
Un día más preparándonos para la rutina, un día más cambiándonos las máscaras que nos oculta.




4 comentarios:

  1. Es cierto,a veces nos vemos obligados a actuar y a colocarnos esas máscaras de las que hablas en nuestra relación con los demás,de todos modos creo que la edad hace que cada vez pase más de colocarme la máscara y prefiera ir con la cara descubierta...piensen lo que piensen
    Un Beso

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  2. Y así día tras día, Espe. La verdad es que arrojarse al mundo "a cara descubierta" es para valientes y todos, en mayor o menor medida, llevamos nuestra máscara.

    Yo, le llamo coraza. Siempre voy optimista, porque además soy excesivamente confiada, y me gusta mucho divertirme y reírme... Pero, también soy sensible en exceso y, para eso, me fabriqué una "coraza" de mujer passota o, como se díce por aquí, de "sobrada" y graciosilla... Me lastimo muy fácilmente (eso entre tú y yo).

    Me encantó tu post, felicidades y muchísimos besos,

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  3. Es verdad Towanda , es la rutina diaria lo que refleja el post. Lo que si me voy dando cuenta que según voy cumpliendo años, esa "coraza" o "máscara" cada vez pesa menos, porque la uso menos, claro.Hubo un tiempo en que lo que más me importaba era el concepto que de mi podían tener los demás. Hoy me da más igual, ya no intento caerle bien a "todos" sino a solo a aquellos con los que más me identifico. A esos si que cuido y mimo. Muchos besos guapa y gracias por tu comentario. Nos vemos ...en el " barco" je,je.ESPE ( me pasa como a ti, muy confiada, creo que todo el mundo es bueno hasta que...la realidad es otra)

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  4. Pues tendremos que espabilarnos un poco, aunque yo soy confiada por comodidad propia...
    ¡Nos vemos en el barco!.
    Un beso para ti que me voy a preparar cenas. ¡Ya voooooooy!

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